sábado, 1 de noviembre de 2014

ROBOTS EXTERMINAN VIRUS DEL EBOLA EN HOSPITALES CON MAXIMA PRECAUCION

N ESTADOS UNIDOS

Robots exterminan virus del ébola en hospitales como máxima precaución

Un robot exterminador de virus y bacterias, diseñado para evitar la propagación del ébola comenzó a ser usado en EE.UU. como la máxima precaución posible en los centros de salud

“Little Moe” ha sido bautizado en los primeros hospitales donde comenzó a ser usado, el robot que emplea pulsos de luz UVC de altísima intensidad, capaz de destruir toda forma virósica, y que alcanza a desinfectar completamente una habitación al cabo de algunos minutos. Las radiaciones que emite el robot, eliminan completamente a los virus en un tiempo promedio de cinco minutos, y se estima que en el caso del virus del ébola, éste se destruye en dos minutos.
El robot debe trabajar completamente solo en la habitación ya que las irradiaciones de pulso de luz UVC, pueden resultar mortales para toda forma de vida, incluso la humana, pero la eficiencia de la tarea de desinfección es total.
La tecnología -desarrollada por la empresa norteamericana Kenex- está ya siendo instrumentada por unos 250 hospitales en todo el país, y los primeros reportes consignan que en línea generales se podrían estar reduciendo las infestaciones hasta en un 50%.

El robot adquiere fama en el hospital con el primer paciente de ébola

“Lo que hay aquí dentro es un bulbo de xenon”, define las características del robot, el profesor Mark Stibich, impulsor de la tecnología que se emplea ya en el Hospital de San Antonio, Texas, donde se internó al primer paciente con ébola en EE.UU.
El bulbo de xenon emite los rayos UV, que son capaces de destruir el DNA de los virus y exterminarlos, “pero después de su funcionamiento no existe ningún riesgo posterior para ingresar a las áreas tratadas” puntualizó el especialista en declaraciones a la cadena KENS5 (www.kens5.com), de San Antonio.
La innovación apunta a expandirse después que la alarma cundió entre la población al saberse de la muerte de Thomas Eric Duncan el primer hombre que arribó portando la enfermedad a territorio norteamericano, procedente de África Occidental. Duncan había llegado a EE.UU. el 20 de septiembre y recibió un tratamiento experimental. El mismo está ahora siendo aplicado al camarógrafo Ashoka Mukpo, que se contagió en Liberia cuando trabajaba para la cadena NBC, y que se encuentran en el Ventro Médico Nebraska.


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