http://www.7dias.com.do/portada/2014/11/05/i175938_gente-leonel-fernandez-impone-terror-contra-prensa-criticos-del-aspirante-presidencial.html#.VFrKF2dO_IU

SANTO DOMINGO (R. Dominicana).-Turbas convocadas por el diputado oficialista Miguel Espinal para “apoyar” al expresidente Leonel Fernández, quien dictó una charla en un hotel de la capital, arrebataron los equipos a cuatro fotorreporteros y golpearon a los periodistas del periódico digital Acento.com.do.
En actitud provocativa y amenazante, los grupos de “tígueres” aupados por Espinal, despojaron de sus equipos a Juan Camilo Cortés y Esteban Morales, de Acento, a Nehemías Alvino, de Diario Libre, y a Willy Jiménez, de Antena.
Los agentes policiales enviados al lugar contemplaron impasibles la agresión contra los periodistas, a lo que después llevaron a un destacamento para que presenten la “denuncia” del robo de sus equipos por los leonelistas.
Los leonelistas también le arrebataron los audífonos a un fotógrafo de Revista 110 e intentaron despojar de su cámara a una mujer que, sin ningún distintivo morado o amarillo, intentó tomar fotos de la manifestación para publicar en su blog.
Uno de los hombres argumentó que se trataba de perredeístas infiltrados, principalmente los fotorreporteros de Acento.com.do, que recibieron varias amenazas durante la cobertura.
Durante la segunda mitad de la mañana y pasado el medio día hubo varios momentos de tensión en los alrededores, del Embassy Suite by Hilton, en la torre Silver Sun de la avenida Tiradentes, donde tuvo lugar la conferencia del expresidente.
El fotógrafo Franklin Guerrero, de NCDN, mantuvo un fuerte encontronazo verbal con un hombre, luego de que el profesional lo fotografiara dirigiendo las turbas.
Con una actitud agresiva y temeraria, los hombres permanecieron en el lugar hasta que culminó la conferencia de Fernández, pasadas las cuatro de la tarde.
Tras los primeros incidentes los encargados de seguridad del evento trataron de convencer a los periodistas de entrar al hotel, pero estos se negaron a aceptar la invitación.
En los alrededores del Embassy Suite by Hilton el diputado Espinal instaló varias “disco-ligth” para promover tanto la candidatura de Fernández como la suya propia para alcalde.
Cientos de peledeístas llegaron al lugar en manifestación de apoyo, conformando un “meeting” que se debilitó luego de la aparatosa llegada de Fernández, que arribó escoltado por al menos diez jeepetas, a la 1:10 de la tarde.
Al final quedaron, prácticamente, solo los “tígueres” que habían caldeado el ambiente, algunos de los cuales trataban con camaradería a miembros de la seguridad del aspirante presidencial.
Esto al punto de que, terminado el evento, uno de los espalderos se acercó a algunos fotógrafos para dejarle su contacto, porque supuestamente sabía quién tenía una de las cámaras robadas.
La actitud agresiva de las turbas alejó a los grupos de activistas que, a través de las redes sociales, habían llamado a protestar contra el expresidente en el mismo momento y el mismo escenario.
Varios ciudadanos llegaron al lugar para expresarse en este sentido, pero tuvieron que retirarse discretamente para evitar actos de agresión.
Una manifestante intentó desenrrollar una pancarta con un mensaje que no se pudo leer dado que, de inmediato, un grupo de hombres se la arrebató y la destruyó.
En el hotel, de manera formal, la actividad del aspirante presidencial, cuya entrada costaba mil dólares, tuvo una duración de tres horas, desde que Fernández hizo su entrada, a las 1:10 de la tarde, hasta que salió de la torre, a las 4:15pm.
Se limitó a saludar a sus seguidores. Minutos después salió su hijo, Omar Fernández, quien expresó que habían quedado muy satisfechos con la actividad.