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25 Enero 2012, 7:49 PM
Pedro Ramón Vásquez Primer
director La Voz del Yuna
director La Voz del Yuna
Llamado. El comunicador solicita al gobierno reconocer su trayectoria
Luego de haber sido un maestro de maestros, haberse ofrecido como canal de ayuda a muchas personas que hoy exhiben grandes fortunas, sacrificarse por los demás a fin de que tengan un mejor futuro, la figura de Pedro Ramón Vásquez y Vásquez languidece ante la miraba indiferente de todos.
Con 105 años de vida, la cabeza llena de anécdotas históricas y muchas precariedades a su alrededor, este dominicano que trilló su camino en múltiples profesiones de la comunicación y las instituciones del estado, ahora clama junto a su esposa, porque alguien se apiade de su situación.
Vásquez y Vásquez, quien fuera el primer director de La Voz del Yuna, la más importante estación radial del país en la dictadura de Trujillo en los años 40, profesor de locución de muchas figuras, ahora vive sus años de ancianidad recluido en su hogar del sector de Alma Rosa II, lidiando con las dificultades típicas que padecen los envejecientes en este país. “Perdóneme que yo me alabe, pero fundé tres universidades que han graduado miles de hombres y mujeres. Aún están funcionando”, dice con énfasis, matizado de las pocas fuerzas que le quedan a su voz al recordar uno de sus episodios de la vida como docente.
En La Voz del Yuna. Don Pedro recuerda sus años en la estación de esta forma: “Petán Trujillo me llamó a mí porque era periodista en esos momentos. Se montó la emisora que era como un juguete y me dijo: Lo voy a nombrar director”.
Indica que no tenía ninguna experiencia en la materia. “Yo la puse hasta las 12:00 de la noche y trabajaban conmigo dos abogados en ese entonces. Había muy pocas canciones y teníamos muchas limitaciones, hasta que nos asociamos a Santiago de Cuba con su emisora que estaba muy por encima de las demás”, destacó en su narrativa Vásquez y Vásquez.
“Yo le aseguro que la CMQ en Cuba y la Voz del Yuna que era la que yo dirigía en Bonao, se fueron arriba”, reveló. “Llegamos a ser la mejor emisora de América, aún por encima de los Estados Unidos. Nos respetaban en todo el continente, eramos superior. Petán se enamoró de esa emisora y fuimos grandes”, dice con tono de satisfacción, mientras sus párpados cansados se amplían como si quisieran desprender el endurecimiento en la retina de sus ojos que le impiden ver con claridad.
Su deseo. El nativo de San Francisco de Macorís solo tiene una petición concreta a las autoridades del gobierno y la misma es externada a través de su esposa Junia Suazo, quien llora desconsolada al decirlo.
“Pedro lo que necesita es que le arreglen su pensión. El recibe solo RD$5,000 pesos que no le dan para nada, pues necesita medicinas y muchas otras cosas que la gente de su edad tiene”, afirma con preocupación.
“Un hombre que fue profesor de locución de Peña Gómez, Beras Goico, Johnny Ventura, Yaqui Núñez y muchísimos otros, no merece estar en estas condiciones”, dijo.
Zoom
Hoja de servicio
Como escritor
Pedro Vásquez nunca pudo decir que compraría una casa con el dinero de sus libros, porque todos los regalaba. Es autor de más de una veintena de obras entre ellas “Nace la Sociedad Bolivariana”, “Historial de Interior y Policia”, “Duarte Apostol y libertador”, “100 dominicanos notables”, “150 dominicanos notables” y “Pelegrín Castillo Agramonte”, este último uno de sus más recientes trabajos.
En instituciones
Ha desempeñado las de ayudante de las divisiones de la ONU y la OEA de la entonces Secretaría de Estado de Relaciones Exteriores, auditor del Aeropuerto Internacional de Las Américas en el gobierno de Balaguer. Además de ser miembro-presidente de Pro Cultura y del Ateno Dominicano, rector de Universidad Tecnológica del Sur (Utesur), miembro directivo del Instituto Duartino y director del Archivo General de la Nación, entre otras funciones
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