Primero de mayo – Una historia de luchas de la clase trabajadora
Escrito por Rob Sewell - luchadeclases.org
A medida que millones de trabajadores y jóvenes salen a las calles en
todo el mundo, para celebrar el Primero de Mayo como un día de
solidaridad de la clase trabajadora internacional. Tenemos que reevaluar
nuestros objetivos comunes a la luz de una creciente crisis mundial del
capitalismo. Escrito originalmente en 2001.A medida que millones de trabajadores y jóvenes salen a las calles en todo el mundo, para celebrar el Primero de Mayo como un día de solidaridad de la clase trabajadora internacional. Tenemos que reevaluar nuestros objetivos comunes a la luz de una creciente crisis mundial del capitalismo.
Desde hace más de 100 años, decenas de millones de personas han expresado su voluntad reiteradas veces para librar al mundo de la opresión, la guerra y la pobreza. La victoria de la clase obrera rusa en octubre de 1917 marcó un enorme avance en la lucha por la transformación socialista de la sociedad. Representaba un faro para los trabajadores a nivel internacional.
Hoy en día, el internacionalismo nunca ha sido tan relevante. Con el colapso del estalinismo y la conversión de la burocracia rusa hacia el capitalismo, el imperialismo de EE.UU. se ha convertido en la fuerza reaccionaria dominante en el planeta. Sin embargo, este coloso tiene dinamita en sus cimientos, ya que se vio obligado a intervenir en varias ocasiones contra los pueblos oprimidos del mundo.
Como el capitalismo global extiende su ámbito de explotación, por lo que los trabajadores se ven obligados a organizarse para defenderse desde las Filipinas a Sudáfrica, desde Corea del Sur a Argentina. En Gran Bretaña, tras la avalancha de recortes de empleos en los últimos meses, el cierre de la planta de Motorola en Bathgate, West Lothian, con la pérdida de más de 3.000 puestos de trabajo, es el más reciente ataque a los trabajadores por el capital internacional. Pero esto es el comienzo de algo mucho peor. Ya 100.000 empleos se han perdido en el sector de las telecomunicaciones como los beneficios de inversión y lleva la inversión a su fin. Los vaivenes en los mercados de valores del mundo son un reflejo de la crisis que genera el capitalismo mundial.
Cada vez más, a medida que avanza la crisis, los trabajadores tienen que armarse con un programa que pueda responder a sus necesidades y aspiraciones. Necesitan hacerlo para recuperar la tradición de lucha del día de primero de mayo. Sí. El primero de mayo nació de las luchas. La lucha por la jornada laboral de 8 horas en los Estados Unidos en la década de 1880, fue el asunto que dio origen al primero de mayo como el Día Internacional del Trabajador. En 1884 la Convención de la Federación de Oficios Organizados levantó una resolución que debía actuar como un faro para toda la clase obrera: “que 8 horas constituirán un día de trabajo legal, después del primero de mayo 1886. Esta convocatoria fue tomada por el movimiento obrero con la creación de la Liga de ocho horas, que propició concesiones significativas de los jefes, y fue testigo de la duplicación de la afiliación sindical.
Alrededor de 25.000 partidarios se reunieron el primero de mayo en Chicago. Los jefes estaban decididos a aplastar el movimiento militante. La policía disparó y mató a los trabajadores, en un piquete de huelga, dos días después. Sin embargo, una bomba lanzada por un agente provocador mató a siete policías, que respondieron disparando a varios trabajadores e hiriendo a cientos más. En las semanas siguientes, la policía llevó a cabo redadas sistemáticas sobre los huelguistas y sindicalistas, rompiendo las reuniones con la violencia. Los líderes de los trabajadores fueron encarcelados y condenados a muerte, pero más tarde esta fue conmutada por cadena perpetua.
Desde la tragedia de Chicago en mayo de 1886, que se conoció a partir de entonces como el día internacional de los trabajadores, los representantes de los trabajadores establecen la Segunda Internacional en 1889, bajo la bandera del internacionalismo de los trabajadores. Una resolución clave del Congreso fue que en cada primero de mayo los trabajadores en cada país hicieran huelgas y manifestaciones a favor de la jornada de 8 horas.
El primero de mayo 1890 los trabajadores hicieron huelgas por toda Europa, con 100.000 manifestando en Barcelona, 120.000 en Estocolmo, 8.000 en Varsovia, mientras que miles se quedaron en casa en Austria y Hungría, donde se prohibieron las manifestaciones. Las huelgas se extienden a través de Italia y Francia. Diez trabajadores fueron asesinados a tiros en el norte de Francia. En las palabras del líder socialdemócrata austriaco, Adler, “capas enteras de la clase obrera con la que de otro modo habría hecho ningún contacto, se han sacudido de su letargo.”
En Gran Bretaña y Alemania, se celebraron grandes manifestaciones el domingo siguiente. A pesar de la incapacidad de protestar el Primero de Mayo, su importancia no se perdió en Frederick Engels, que había sido testigo de la tregua política entre el movimiento laborista británico, desde los grandes cartistas días de la década de 1840: “más de 100.000 en una columna, el 04 de mayo 1890, la clase obrera Inglesa se unió en el gran ejército internacional, su largo sueño invernal fue roto por fin. Los nietos de los antiguos cartistas están entrando en la línea de batalla”.
Desde entonces, muchos trabajadores han muerto, por la jornada de 8 horas al día, laborales. Muchos años de lucha de la clase obrera y la resistencia han seguido y nos sentimos orgullosos de celebrarlas en esta fecha. Pero esto no es suficiente!
Por desgracia para nuestra clase, todavía estamos atados por las cadenas del capitalismo mundial. Los trabajadores han intentado varias veces cambiar la sociedad, pero han sido frenados por sus líderes. Por eso hoy, como socialistas, no sólo celebramos la resistencia de la clase, sino también reconocemos el escandaloso papel desempeñado por la organización sindical y los líderes de la clase trabajadora. Se han convertido en “los lugartenientes obreros del capital”, sólo interesados en ofertas y acuerdos con los patronos del corazón dulce “, en oposición de los trabajadores a los que supuestamente representan.
En Gran Bretaña,el Primero de Mayo ha sido ampliamente ignorado por los líderes del movimiento oficial, en su búsqueda de la respetabilidad y la colaboración de clases. A lo sumo, sólo de palabra se paga a la solidaridad o el internacionalismo. Como resultado de ello, los sindicatos de hoy en día no están para luchar con eficacia por nuestra clase.
La lucha por la regeneración del Trabajo y el movimiento sindical está ligada a la lucha por las políticas socialistas. El Partido Laboral fue creado hace un siglo para representar los intereses de la clase obrera en el parlamento. Por desgracia, ha sido tomado por los Blairites que quieren convertirlo en un partido capitalista. Corresponde a las bases, sobre todo de los sindicatos, para sacar al a la derecha y tomar de nuevo el partido.
Sin embargo, una clara alternativa a las políticas capitalistas debe ser presentada dentro del lado del movimiento obrero. No a la tregua de clases! No a las políticas conservadores! Para un gobierno laborista en un programa socialista!
Sólo al hacerse cargo de los “altos mandos” de la economía, los monopolios, bancos y compañías de seguros, bajo el control y la gestión democrática de los trabajadores, se puede socializar la sociedad, no en interés de los beneficios millonarios, sino para las necesidades de las personas que trabajan y crean la riqueza de la sociedad.
El futuro del movimiento obrero de hoy está en manos de sus bases. Tenemos que empezar a recuperar el pasado oculto del día primero de mayo, por el día de un esfuerzo de crear una alternativa de lucha real. Ya sea que usted está trabajando, estudiando, o en el paro, el Primero de Mayo es nuestro día! En las palabras del Manifiesto Comunista: “¡Trabajadores del mundo, uníos”
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