EL MONITO Baile Exótico.

EL MONITO

Baile  Exótico.

En una nota  dedicada al folklorista Fradique Lizardo, de la autoría  del Dr. Jovino A. Espínola Reyes,  fechada en, octubre 3  del 1975. Da  cuenta de  un exótico baile que fue introducido por los cubanos que llegaron a La Vega,  por el año de 1897.

Cuando  la guerra de la Independencia de Cuba, pues una  cantidad considerables de nacionales cubanos se instalaron en esta  ciudad, de diferentes extractos sociales, quienes impulsaron el desarrollo  cultural, artístico, comercial, intelectual y folklórico  ya que  son los cubanos que realmente introducen el carnaval a esta  ciudad.

El Dr. Espínola Reyes,  inicia su relato así “  en esa época, mi padre tenía  una gran zapatería en la  cual laboraban  unos treinta operarios, entre  ellos  habían  puertorriqueños, españoles, haitianos,  y dominicanos y de diferentes regiones del país, además  cubanos, siendo estos los últimos en ser  empleado en  la zapatería

Añade en su narración, el reconocido intelectual  veganos. “un sábado después   de haber recibido su salario, en la noche fueron un  grupo de los trabajadores, a un  barrio, al que llamaban  “Los Pirindines”, en donde había una gran casona provista de cantina, billares,  y lotería de cartón o familiar  y  donde se celebraban los  días de fiestas bailes muy especiales de gentes según dice Espínola, ignorante, agreste y de mal coexistir

Dice “que por primera vez en esa ocasión montaron  el sicalíptico baile denominado “EL MONITO”, que con antelación  ya se  habían  ensayado.  Y al  filo  de la media noche fueron sorprendidos y hecho presos, por los agentes  del cuerpo  de serenos y vigilantes nocturnos, el lunes  aclamaron a mi papa,  continúa diciendo Jovino Espínola, el cual tenía influencia con las principales  autoridades, debido a que era compadre del Delegado Político de todo el Cibao,  muy amigo del Gobernador, del Comisario y demás. Seguido fueron liberados sin ser multado.

El BAILE ERA COMO  SE DESCRIBE A CONTINUACION.

Se ponían dos filas de hombres y mujeres a la distancia de 8 o 10 pies de separación, ambas filas completamente desnudas, cuyas personas algo separada una de la otra, cantando se saludaban obedientemente a tres golpes que daba con  su bastón en el piso el director.

El director se  situaba al medio  entre las dos filas, diciendo avancen  y los hombres sobre las mujeres moviendo las caderas  rítmicamente, cantando. Nosotros  hemos venido aquí, señoras para bailar el Monito. Así el Monito. Aquí el Monito así.

Paran. .Vuelven a cantar y bailar al compás  de la música que toca la melodía del  canto, bailan entrelazados. Y entonces el director da tres golpes en el piso con su bastón, y con una voz imperativa dice: cada fila a su puesto, para la música,  y avanzan las  damas cantando la misma melodía….  Nosotras  hemos venidos así señores para  bailarle hoy el monito. Aquí el Monito así el Monito hoy. Moviendo las caderas con gracias se apretujan  y bailan al compás de la música.

El director da la orden de separación por medio de tres golpes de su bastón, dice. Cada fila a su  puesto. Mientras cesa la música. El director ejecuta la señal, los hombres dicen  con una nueva melodía: desde ayer no lo dan con tomate, ni tampoco con bacalao, que a mí me gusta salao y nunca remojado. Jao, jao, jao.

Se retiran los hombres obedeciendo a la orden del director, avanzan  las damas cantando…. Yo tengo un chicharon, que lo  cambio por salchichón de Vichi o de Lion, que tenga  buen espesor como bate de beisbol, y moviendo las caderas aceleradamente se entrelazan  con los  hombres.

Comienza la música, hombre detrás de mujer, caminan con movimiento desenfrenado. Forman una rueda quedando  al centro el director que ordena ¡Más movimiento, Menos movimiento de caderas, caminen más a prisa… y al final rendido de cansancio caen todos al suelo jadeantes, sudorosos. ¡ Y entonces………………