El Solitario de La Vega Real Federico García Godoy, (1857-1924)

El Solitario de La Vega Real

El Solitario de La Vega Real
Federico García Godoy, (1857-1924)


Por Ubaldo Solís

Una imagen. Este excelente escritor, no ha sido colocada en el sitial que realmente merece, en la Literatura Dominicana. Sus críticos han obviado su dedicación a las letras, siendo más grande que muchos quienes le han otorgado falsa.

Federico García Godoy, es sin duda el escritor más formado en el medio literario de la República Dominicana, el proceso de su formación a base de constancia en el estudio, siempre despreciando los halagos de los acostumbrados elogios hiperbólicos

Trabajó durante más de cuarenta años en la labor literaria, tan difícil en nuestro país de la época que le toco vivir en ciudad novia del Camú, por la falta de faciliadedes para la publicaciones de sus trabajos, como también de los problemas políticos que constantemente giraban en torno a nuestra nacionalidad,

Como también de aquellas personas que no saben producir nada y alimentan su espíritu con la intriga acosando a los otros como buitres hambrientos

Entre las muchas cosas desconocidas ignoradas por la mayoría de los dominicanos de García Godoy, es su aspecto filosófico. Publico varios trabajos de esta índoles en revistas y periódicos, entre estos trabajos unos de los más impotentes recuenta “El Bergsonismo”. “Hora de Estudio” y “La Religión de la Humanidad”

Solamente Armando Cordero, se ha hecho eco de ello, en su libro “Panorama de la Filosofía en Santo Domingo”, 1962, cuando dice “al lanzar los cimientos de sus conceptos en el surco de la crítica filosófica, tan difícil de fecundar, solamente estos propósito tuvo; ofrecer a la juventud orientaciones sanas, justas y bien intencionadas”.

“El nacionalismo sustentado por Federico García Godoy, al conjuro del Americanismo Literario difundido por José Enríquez Rodó, Manuel Urgarte y Rufino Blanco Bombona, culmina como un nacionalismo de acción política”, expresa, A. Cordero.

Desgraciadamente, su pensamiento aún hoy no ha sido comprendido por una gran parte de la población pensante dominicana, quizás porque aquellos que han tratado de penetrar en su cerebro a través de sus obras, sólo se han quedado en su cuerpo cabelludo.

Se han equivocados, han interpretado el polvo que la brisa arrastra desde el ambiente en que estos impregna en los epitelios de aquellos que verdaderamente intenta instruir a su pueblo

Entres los críticos dominicanos que han comprendido la obra de Federico García Godoy, están Rufino Martínez, este se ha profundizado en la vida del escritor vegano. J. Enríquez Hernández, quien conocía le personalmente a cabalidad. Armando Cordero, es quizás el único dominicano en haber comprendido a plenitud el aspecto filosófico del Solitario de La Vega Real

Ningún otro intelectual dominicano ha logrado, sin salir de la República conquistar su reputación en las letras hispanoamericana, es más conocido como crítico que como escritor de novelas, aún su labor literaria es, fuerte, comunicativa y de una gran sensibilidad por la clase humilde, su labor como crítico alcanzo una colosal proporción la mayoría sus trabajos fueron publicada en el periódico “El Porvenir” de la ciudad de Puerto Plata.

Su Vida
De nacimiento cubano y dominicano de corazón, hijo de Federico García Copley y Josefa Godoy.
Con motivo a los acontecimientos revolucionarios que irrumpieron en Cuba el 10 de octubre del 1868, cuando el General Carlos Manuel de Céspedes, iniciando las revueltas acaudilladas por el Gral. Joaquín Agüero, lanzó en el ingenio de la Damajagua el grito de guerra separatista.
La Familia García Godoy, viajó a la ciudad de Santo Domingo de Guzmán.
El futuro prócer de las letras nacionales tuvo como verdadero maestro a su padre, profesor, literato de merito indiscutible, en cuanto a idiomas extranjeros realizó sus estudios en el colegio “San Luís Gonzaga”
Después de haber residido en Puerto Plata y Santiago, en dos periodos de su juventud que se iniciaba en los problemas culturales, se instala en La Vega y contrae matrimonio con la Sra. Rosa Ceara y procrea familia

La inspiración por el embrujo de sus paisajes, la hidalguía, la hospitalidad de los moradores erige su baluarte. Levanta su antena y extrae el fragor de las luchas partidaristas, que tanto han menoscabado nuestro desarrollo histórico, castrando las múltiples proyecciones de la cultura

Sus libros visto a la luz de los tiempos en que fueron escritos así como las consideraciones al medio donde el cual fueron dados a la publicidad, representan un esfuerzo heroico.
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Esa empresa por así llamarlos es para seres de altos talentos y con carácter como lo señala Clamenceau, al estudiar la vida de Demóstenes, el príncipe de las ágoras helénicas. “Es muy difícil mantener las disciplinas interior, a menudo severa, que impone el servicio desinteresado de la causas nobles”.

Federico García Godoy, no sólo defendió con honra el acervo de la cultura dominicana sino que contribuyó a forjarlo con clara inteligencia y adecuada interpretación de nuestra grandeza y miserias
Si sus obras no estuviesen enaltecidas por ideas estéticas y filosóficas que enriquecen el acervo de las letras nacionales, dos razones existen para estudiarla con verdadero respeto. El Patriotismo que ilumino su vida y el entusiasmo generoso que inspiro su lucha por el ideal en las noches de nuestras discordias civiles..

En la redacción de “El Pueblo”, periódico que se editó en La Vega, en el transcurso de los años 1896-1899, actuó con gran descaro y como director del “El Día”, diario de esta ciudad defendió con coraje en plena intervención norteamericana los intereses cívicos del pueblo dominicano.

Se inicia en las faenas periodísticas en “El Porvenir”, decano de la prensa nacional, periódico el cual le corresponde el honor de haber servido de tribuna a los primeros trabajos de insignes hombres de las letras dominicanas. Centenares de artículos de Don Federico García Godoy, se encuentran en periódicos y revistas qué existieron en el País en distintas apocas como son: “El Progreso”, “El Adalid”, “Sangre Nueva”, y “La Defensa”, en La Vega. “ Cuna de América”, “ Renacimiento”, “ Letras Comospolita”, “Blanco y Negro”, “ El Tiempo”, “El Siglo”, “Listin Diario”, “La Opinión”, “ Nuevo Diario”, “El Combate”, “ El Imparcial”, “ La Bandera”, y “ Bandera Libre”, en Santo Domingo. “El Diario” y “La Información” en Santiago, “El Boletín de Noticias” de Puerto Plata”.
Como Periodista se advierte en sus trabajos lo mismo que en sus libros, la calidad estética de su prosa, está determinada por la inquietud del estilo clásico.

En todas sus obras sean estas criticas o la literatura histórica fluye un aticismo de equilibrada modalidad aun cuando exterioriza conceptos de filosofía política conserva la altura de la expresión que da la elocuencia a las palabras, nunca se aparto de lo humano aun que llevo el genero de lo divino

Frente a la religión sin ser libre pensador nunca concibió el sentido dogmático de la fe católica, siempre su vida estuvo inspirada por una gran admiración por la excelsa figura que alienta y vivifica el sentimiento cristiano.

Cunado en su hogar en La Vega, con un libro abierto entre las manos, cae el titán en brazos de la perca, el 12 de febrero del 1924, llevándose en su alma la tragedia del imperialismo Estadounidense, desparramado entonces como un vendaval sobre las tierras de América Latina.

Con el sabor amargo de la practicas anti diplomáticas de los ministros Russel y Sullivan, partidario declarado de la fuerza la que declara fuera de Ley y destruye su obra “Derrumbe” grito de protesta por un hombre herido por la esclavitud, él se marcho para siempre con la garganta árida aun por la efervescencia patriótica de sus conferencias y discursos en el “Teatro la Progresista”, verdadera cátedras de dignidad nacionalista y de coraje cívico.
Sus obras:
RECUERDOS Y OPINIONES, Santiago, 1888,117 Págs. (artículos de críticas literarias).
IMPRESIONES, Moca, 1889, 114 Págs., (crítica)
PERFILES Y RELIEVES, Santo Domingo, 1909, 181 Págs., (crítica)
RUFINITO, Sucedido histórico, Santo Domingo, 1908, 207 Págs.,
LA HORA QUE PASA, notas críticas, Santo Domingo, 1910, 297 Págs.,
LA PATRIA Y EL HEROE, La Vega, sobre Diverge, 1911, 25 Págs.
ALMA DOMINICANA, novela histórica, Santo Domingo, 1911,220 Págs.
PAGINAS EFIMERAS, Movimiento Intelectual Hispanoamericano, Santo Domingo, 1912, 346 Págs., reimpresión con el titulo Literatura Americana de Nuestro Días, Madrid 1915, Biblioteca Andrés Bello.
GUANUMA, novela histórica, Santo Domingo, 1914, 380 Págs.
BAJO LA DICTADURA, Moca, 1914, 30 Págs.
DE AQUÍ Y DE ALLA, Notas Críticas, Santo Domingo, 1916, 445 Págs.
LA LITERATURA DOMINICANA, París-New Cork, 1916, 44 Págs.
El DERRUMBE, Historia de la invasión norteamericana en la República Dominicana, Santo Domingo, 1917, ( este libro, suprimido por el gobierno militar norteamericano, se salvaron unos cuantos ejemplares, algunos capítulos fueron reproducidos por revista Cubana Contemporánea, julio 1917, por esta obra, la biblioteca de García Godoy, fue incendiada, por orden de los militares norteamericanos, radicado en la Ciudad de La Vega, ocasionándole al autor, una gran despreción , siendo este acontecimiento uno de los más criticados y que le valió la repulsa del pueblo vegano, hacia los invasores
AMERICANISMO LITERARIO (Martí, Rodó, García Calderón, R. Ramos Fombona), Madrid, 1918, 248 Págs.
DE LA HISTORIA, La Vega, 1920, 71 Págs., semblanzas históricas dominicanas
AL MARGEN DEL PLAN PEYNADO, La Vega, 1922, 72 Págs., sobre el proyecto de evacuación de las fuerzas militar norteamericana del territorio nacional.

Aparte de un gran nuecero de artículos publicados en periódicos de La Vega, Santiago, Puerto Plata, Santo Domingo, como también en diferentes naciones de América Latina, Estados Unidos y Europa.