La crisis hospitalaria
La niña tenía seis años y la fiebre nunca cedió durante dos días. Los viajes al hospital fueron uno tras otros, había que hacerle un estudio en los pulmones, pero el equipo del hospital de San Juan de la Maguana estaba en reparación al igual que la infraestructura que lo albergaba.
El ingeniero suspendió los trabajos por falta de pago a cubicaciones realizadas. Cuando llegó la recomendación de enviarla al hospital de San Cristóbal, era tarde, María Alejandra había fallecido. Dicen que de leptospirosis.
Este drama humano no es único de la familia de maría Alejandra, pues se ha convertido en común en los hospitales públicos por deficiencia en el servicio, falta de medicamentos esenciales, equipos y a veces desidia en la atención del personal médico, ha tomado un giro dramático con la paralización de áreas vitales a causa del proceso de rehabilitación y remozamiento a que son sometidos 56 centros asistenciales.
Esa situación agrava la crisis en el sistema de salud, caracterizada por problemas administrativos y falta de recursos económicos para atender la creciente demanda de servicios de la población.
Son frecuentes en los últimos meses las denuncias de muertes de niños y adultos en los hospitales y subcentros de salud, atribuidos a falta de atenciones, contaminación de áreas de internamiento, falta de oxígeno y problemas en el sistema eléctrico.
La denuncia de las precariedades en los asistenciales estatales se ha hecho recurrente de parte de médicos, enfermeras y otro personal de salud mediante protestas, vigilia y paralización en los servicios, mientras crecen las protestas de los comunitarios donde están ubicados los hospitales en rehabilitación.
La situación es dramática en los 56 hospitales sometidos a remodelación pues en la mayoría existen áreas esenciales inhabilitadas, como salas de consultas, internamientos, servicios de rayo X, laboratorio, intervenciones quirúrgicas y otras que los mantienen semiparalizados.
La situación fue expuesta por los ingenieros contratistas Delta Sánchez, a cargo de los trabajos en el hospital Doctor Luis Morillo King, de la Vega; Antonio Medrano, del regional Alejandro Cabral, de San Juan de la Maguana; Juan Romero, del Antonio Musa, en San Pedro de Macorís, y Zuleica Paulino, de la Maternidad San Lorenzo, en Los Mina.
La gravedad
La paralización de los trabajos de reconstrucción acarrean problemas graves para ofrecer los servicios de Salud, como en hospital Doctor Luis Morillo King, de la Vega, donde están inhabilitadas las áreas de rayos X y el sistema de electricidad y la maternidad San Lorenzo de Los Mina, con el área de internamiento de 56 camas fuera de servicio.
Otro caso es del hospital Francisco Moscoso Puello, en el Distrito Nacional, cuyo proceso de rehabilitación mantiene inhabilitados tres quirófanos, mientras el Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia tiene problemas con los equipos de refrigeración en el área de la morgue.
En tanto, el pabellón de internamiento pediátrico está totalmente inhabilitado, por lo cual hay 34 camas y un quirófano fuera de servicios.
En el Distrito Nacional están suspendidos los trabajos de remodelación de los hospitales Francisco Moscoso Puello, Maternidad La Altagracia; en Santo Domingo Este, la Maternidad San Lorenzo, de Los Mina, el Doctor Vinicio Calventi, en los Alcarrizos, así como el hospital siquiátrico Padre Billini, en Pedro Brand.
Asimismo, los hospitales de Villa Mella, en Santo Domingo Norte; Almirante, en Santo Domingo Este y el Elvira Echavarría Viuda Castillo en el municipio de Guerra; el materno infantil de Boca Chica y el Subcentro de Engombe, en la provincia Santo Do mingo.
En Santiago, pasa por la misma situación el hospital regional infantil Arturo Grullón, donde se inició su remodelación y está paralizada desde hace cuatro meses por falta de fondos.
En la región Norte también están paralizados los trabajos de remodelación de los hospitales Ricardo Limardo, de Puerto Plata; Luis Morillo King, de La Vega; Doctor Pedro E. Marchena, de Bonao; San Vicente de Paul, en San Francisco de Macorís; Inmaculada Concepción de Cotuí, provincia Sánchez Ramírez; Luis L. Bogaert, en Mao, provincia Valverde; Doctor Alberto Gautreaux, en Samaná; Padre Fantino, en Montecristi; el municipal de Jánico, Santiago, y el Sigfrido Álvarez, de Montecristi.
El hospital Antonio Yapour de Nagua, provincia María Trinidad Sánchez; Toribio Bencosme, de Moca, provincia Espaillat; Leopoldo Pou, de Samaná, el hospital provincia de Santiago Rodríguez.
Además, el Octavia Gautier de Vidal de Jarabacoa y Pedro Antonio Céspedes, de Constanza, en la provincia La Vega; el Sigfredo Alba, en el municipio de Fantino, provincia Sánchez Ramírez, y el Villa La Mata, en esa misma demarcación.
En el Sur están el hospital, Alejandro Cabral , de San Juan de la Maguana; el de Las Matas de Farfán, de esa provincia; el Jaime Mota, de Barahona; Juan Pablo Pina, San Cristóbal.
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