jueves, 23 de octubre de 2014

LOS PRIMEROS ANOS RELIGIOSOS DE LA CONCEPCION

LOS PRIMEROS ANOS RELIGIOSOS DE LA CONCEPCION


Fuente, de donde  fue tomada .http://serrot-notitep.blogspot.com/2010/09/los-primeros-anos-religiosos-de-la.html
El viernes 12 de octubre del 1492 en horas de la mañana, Cristóbal Colon Fontanarosa llego a una pequeña isla del archipiélago de las Bahamas, la que era llamada por sus pobladores Guanahani, tomo posesión de la misma en nombre de Isabel, Reina de Castilla y la llamo San Salvador, de dicha isla zarpo el domingo 14 en horas de la tarde, navegando con rumbo sudoeste llego a una pequeña isla, la cual nombro Santa Maria de la Concepción, hoy Rum Cay (Cayo Ron), después otra que llamo Fernandina, hoy Long Island (Isla Larga) , y después otra que bautizo con el nombre de Isabela, hoy Crooked ( ), la falta de viento retrasa la navegación, el sábado 27 en horas de la tarde los marinos avistan de nuevo tierra y en las primeras horas del domingo 28 llegan a la isla que sus moradores denominan Cuba o Coba y a la cual Colon llamo Juana, a principios de diciembre se aleja de Juana y el miércoles 5 de diciembre llega a una isla que es llamada Haití por sus pobladores, toma posesión de esta, explora su costa norte, quedando admirado de las tierras que ve, por lo cual se expresa de ellas y sus árboles.: “mucho de ellos de la naturaleza de España, como carrascos y madroños y otros”, otras expresiones de Colon sobre esta isla en su primer viaje son las siguientes: “parece toda labrada o gran parte de ella, y parecían las sementeras como trigo en el mes de mayo en la campilla de Cordova”, los marinos pescan “lenguados y otros peces como los de Castilla”, hay dos hermosísimas vegas “cuasi semejantes a las tierras de Castilla, antes estas tienen ventajas”, por lo cual bautizo la isla con el nombre de Española.

El lunes 24 de diciembre en horas de la noche o el martes 25 en horas de la madrugada encalló la Santa Maria, la madera de la nave que fue rescatada del naufragio fue usada para construir un fuerte, el cual bautizo con el nombre de La Navidad, en el mismo dejo 39 hombres bajo el mando de Diego de Arana, alguacil de la flota, y, primo de Beatriz de Arana, la compañera cordobesa de Colon; dejo además a Pedro Gutiérrez, ex repostero del rey, a Rodrigo de Escobedo, escribano de la flota, otros que quedaron fueron Luís Torres, interprete, los cirujanos maestre Juan y maestre Alfonso; El lugar exacto del fuerte La Navidad no ha sido identificado a la fecha, solo se sabe que fue en el área en donde hoy esta una aldea llamada Bord de Mer de Limonada.

Colon retorno a España para informarle a la Reina Isabel del resultado del viaje, lo cual realiza en la corte de los reyes Fernando e Isabel en Barcelona, recibiendo autorización para preparar una nueva expedición, la cual zarpa el lunes 23 de septiembre del 1493 del puerto de Cádiz, llegando a nuestra isla el lunes 25 de noviembre del mismo ano, luego de visitar la zona donde había fundado el fuerte La Navidad, navega por la costo norte con rumbo este hasta llegar a la ría de un gran rió llamado hoy Bajabonico que hoy tiene otro curso, en donde desembarca y se establece el jueves 2 de enero del 1494, llamando al poblado que ordena levantar La Isabela, el lunes lo que es día de la Epifanía del Señor, el padre benedictina Bernardo Boil oficia una misa solemne y cantada, la cual es la primera alebrada en el Nuevo Mundo, a Boil el Papa Alejandro VI le había conferido el martes 25 de junio del 1493 mediante la Bula Tibi qui Presbyter es, privilegios que se le otorgaban a los Vicarios Apostólicos, así como la potestad de erigir monasterios y permitir que religiosos mendicantes pudieran adquirir terrenos, dicha misa fue concelebrada por los padres franciscanos Juan de la Cuela y Juan de Tisin, el Jerosolimitano Ramón Pane, cuatro sacerdotes seculares y cinco monjes memores del monasterio de Montserrat, de Catalina, esta tuvo efecto en una capilla improvisada.

Colon envía una expedición bajo el mando de Alonso de Ojeda hacer el Norte desde La Isabela y otra con rumbo. Este comandada por Gines de Gorvalan, al regreso de las mismas, Gorvalan le hablo maravillas del territorio que había explorado, por lo cual Colon determino marchar de inmediato hacia la zona que hay llamamos Cibao y que seguir Padre Martín de Anglerias era llamado Cibana, llegando hasta el yucataque (aldea) llamado Guaricado, en donde vivía Guarionex, el cacique de Magua, con el cual concepta una alianza al casar un indio lacayo que había sido bautizado en Barcelona con el nombre de Diego Colon, con una hija del cacique, esto le permitió establecer sin dificultad un fuerte separado del Guaricado por un río que hoy es conocido con el nombre de Río Verde. Tras la expedición de Colon había marchado Fray Ramón Panea si como Fray Juan Borgonon de la orden franciscana, con la finalidad de catequizar a los nativos, es así como convierten a la fe católica al nitaíno Guaticagua y a su familia, con formada por 16 personas, las cuales fueron las primeras en recibir el Sacramento del Bautismo en este continente, el acto del bautismo que fue realizado por Fray Ramón Pane, según refiere el mismo tuvo efecto en La Concepción el martes 21 de septiembre del 1496; Guaticagua tomo el nombre de Juan Mateo en honor a los dos evangelistas, se dice que tiempo después Juan Mateo murió exclamando Dios naboria daca (soy siervo de Dios), por lo cual Fray Ramón Pane lo considera junto con su familia como los primeros mártires en estas tierras de América.

Durante su estadía en La Concepción Colon exploro los alrededores, llegando hasta la cima de un cerro desde el cual contemplo una vega que el llamo Real, le agrado tanto el lugar que le ordeno al teniente de navío Alonso de Valencia que plante una cruz en dicho cerro, para lo cual este utilizo unos 20 hombres en su mayoría marinos y carpinteros, la madera la obtuvo de un enhiesto árbol de los existes en el lugar, dicha cruz, el larguero midió unos 18 o 20 palmos (13 o 14 pies) y de brazo uso una rama gruesa, es posible que para sus construcción usara un nisfolo, árbol que hoy llamamos zapotero; dicha cruz fue la primera plantada en este continente como símbolo de cristiandad, debemos recordar que las cruces plantadas en las isla que habían encontrado los españoles eran para dar a conocer que esas tierras estaban en poder de un Señor Cristiano, y no representaban un elemento de la religión cristiana; hasta dicha cruz llegaba el Almirante Cristóbal Colon con cierta frecuencia para dedicarse a rezar y meditar, como un cristiano del renacimiento, amante y temeroso de las cosas del Señor Dios, a la vez que buscador de poderes terrenales.

Dicha cruz hace que el cerro se transforme en un lugar al cual acuden en peregrinación españoles de la isla, que buscan en la misma salud y consuelo, por lo cual podemos decir que el lugar se transformo en el primer santuario cristiano en América, el cerro de la Vera Cruz del Almirante es lugar de peregrinación, a el acuden enfermos en busca de salud y sanos para dar gracias por la salud que han logrado por su favor.

Las mandas (envió de dinero u objetos ofrecidos en promesa) y limosnas son abundantes, pero su uso no es todo correcto, razón por la cual Carlos I de España (V de Alemania) le ordena al tesorero del obispado de LA Concepción, que lo era Álvaro de Castro, que tuviera cuidado en el empleo de las sumas que donaban los fieles, así como con las demás ofrendas.

El mismo Carlos I, le escribió al Papa Clemente III, sobre los milagros que hacia la Vera Cruz, suplicándole, que autorizara la devoción de los fieles y otorgamiento de indulgencias a los que visitaran el lugar en peregrinación e hicieran ofrendas, el mismo Carlos I ordeno que la Milagrera Cruz, del cerro del Almirante fuera llevada a la catedral de la Concepción en la Villa de la Concepción, se pusiera en una capilla detrás de un humilladero para su veneración.

En la primera década del siglo XVI, Nicolás de Ovando dispuso la construcción de una iglesia de piedra y ladrillo, la cual luego seria catedral y de un convento de franciscanos, de acuerdo a escritos del padre Bartolomé de las Casas, que estuvo alojado en el mismo, este tenia una hermosa huerta en la cual habían naranjos, granados y canafistoles, los cuales fueron atacados por una plaga de hormigas que amenazo con acabarlos, pero dicha plaga fue controlada colocando piedras de soliman (sulfato de mercurio) en dicho huerto.

El sábado 16 de noviembre del 1504 el papa Julio II, ante el ruego de los Reyes Católicos emite la Bula Illus dulcito praesidio, mediante la cual erige tres villas, una Metropolitana en la provincia de Jaragua y dos sufragáneas; una en Lares de Grahabam en la Provincia de Baynoa, y otra en La Concepción, o Magua, a estas villas episcopales se le dieron los nombres de Ayguacense a la Metropolitana de Jaragua, y a las sufragáneas fueron denominadas: Maguacense la de la Concepción y Bayonense, ala de Lares de Guaba,, ese mismo día el Papa Julio II, expidió el Breve Ecclesiarum Utilitate mediante el cual nombra a Don Frey Francisco García de Padilla, Obispo de Baynoa.

Esta bula fue anulada, no se si por causa de la muerte de la Reina Isabel la Católica, la cual aconteció el miércoles 26 de ese mismo mes de noviembre o debido a las intrigas de personas de la corte española cercanas al Rey, las cuales no querían que vinieran a este continente dignatarios eclesiásticos.

El viernes 8 de agosto del 1511, el Pontífice Julio II expide su Bula Romanus Pontifex, mediante la cual suprime las Sedes Ayguacense, Bayonense y Maguacense y crea las Sedes de Santo Domingo y La Concepción en esta isla y la de San Juan en la isla de Puerto rico, en la misma Bula el Papa le da titulo de ciudad a Santo Domingo, La Concepción y San Juan (en Puerto Rico) y ordena que sus iglesias sean llamadas Catedrales y sus obispos nombrados. Para ocupar la Silla Episcopal de Santo Domingo fue confirmado Don Fray Francisco García de Padilla, el cual había sido designado en el 1504 para la sede Bayonense (Lares de Guaba) para la Sede de San Juan fue designado el Licenciado en Teología Son Alonso Manso y para la Sede de La Concepción el Dr. en Derecho Don Fray Pedro Xuárez de Deza.

En esa mismo ano de 1511, estando el Virrey Don Diego Colon y la Virreina Dona Maria de Toledo con la corte virreinal con motivo de la fundición de oro que se efectuaba dos veces al ano en La Concepción, oficio Fray Bartolomé de las Casas su primera misa luego de haber sido ordenado sacerdote en Sevilla, aconteció además que llegaron a esta ciudad los frailes dominicanos Pedro de Córdova (Superior), Antón de Montesinos y Bernardo de Santo Domingo, predicando Fray Pedro de Córdova frente al Virrey Diego Colon y sus corte, sobre dicha predica expresa Fray Bartolomé de las Casas lo siguiente: “Creo que llego sábado, luego domingo, que acaecía ser entre las octavas de Todos los Santos, predico un sermón de la gloria del Paraíso que tiene Dios para sus escogidos, con gran fervor y celo…sermón alto y divino, e yo se lo oí, e por oírselo, me tuve por felice Amonestó en el a todos los vecinos que en acabando de comer, enviasen a la iglesia a cada uno de los indios que tenia en casa, de que se servia…. ” esta fue la primera predica a favor de los indios en todo el Nuevo Mundo, después de dicho Sermón, fue el Sermón de Adviento de Fray Antón de Montesinos. Los obispos Fray Pedro Xuárez de Deza y Fray Alonso Manso, de La Concepción y San Juan fueron consagrados en Sevilla, no así Fray García de Padilla que había muerto; las catedrales fueron consagradas el domingo 26 de septiembre del 1512 en Sevilla. El obispo Don Pedro Xuárez de Deza que era sobrino de Fray Diego de Deza, Arzobispo de Palencia, Córdova y Sevilla, caterético de prima en teología de la Universidad, de Salamanca, confesor del Rey Fernando de Aragón y cabeza del Santo Tribunal, fue el primero en venir a este continente quizás debido a la posición que ocupaba su trío.

El jueves 2 de febrero del 1514, el Obispo Xuárez de Deza le escribió al Rey Fernando informándole que ya estaba en esta villa. La diócesis de La Concepción estaba conformada por la Concepción, Santiago, Puerto Plata, Puerto Real, Lares de Guaba, Salvatierra de la Sabana, Santa Cruz de Icagua (El Seibo), Bonao y la Mejorada del Cotui.

De las acciones del Obispo Xuárez de Deza no hay muchos conocimientos, lo que yo he podido conocer hasta la fecha es que el sábado 25 de febrero del 1514 bendice en la villa de Santo Domingo, el solar en el cual será levantada la catedral de dicha villa; colocando en el centro del mismo una cruz; el miércoles 27 de septiembre de ese mismo el Rey Fernando V, le escribe dándole respuesta a sus cartas del viernes 28 de abril y domingo 11 de junio del 1514, por la misma el Rey le autoriza al Obispo Xuárez de Deza que da permiso para que los naturales de Castilla puedan casarse con indias, como el lo solicitara para que puedan comulgar, además le orden tomar 10 esclavos para que se pueda terminar la construcción de la iglesia de dicha villa, el jueves 19 de octubre el Rey Fernando V le escribe al Obispo Xuárez de Deza, dándole las gracias por haber provisto de clérigos los pueblos del obispado de Santo Domingo. excitación

El lunes 16 de julio del 1515 el Obispo Xuárez de Deza, le escribió al Rey Fernando V, solicitándole varias cosas, entre las cueles estuvieron, la apertura de las fundiciones, que no se permita cerca de los puertos oro para fundir y que se le enseñe a algunos indios artes mecánicas.
En carta fechada el martes 17 de marzo del 1523, Carlos I le propone al Papa que le silla Episcopal de la Concepción, que se encuentra vacante por haber muerto Don Pedro Xuárez de Deza, sea ocupada por Fray Luís de Figueroa; En comunicación fechada viernes 22 de abril de 1524, el Dean y el Cabildo Eclesiastico de la Concepción le informan al Rey Carlos I que se han iniciado los trabajos de construcción de la catedral, pero que por falta de recursos no se puede continuar, por lo cual están pidiendo limosnas, para concluir voy a leer esta Real Cedula: “El Rey, Reverendo en Xpo. Padre don Alonso de Fuenmayor, obispo de Santo Domingo y la Concepción de La Vega, del nuestro Consejo, e nuestro Presidente de la nuestra Audiencia y Chancillería Real de la Isla Española: Yo he sido ynformado que la Cruz de LA Vega no esta con la veneración que se requiere, porque dizque esta en el campo sin humilladero ni cerradura alguna, e porque como veis, es justo, pues Nuestro Señor ha sido servido de obrar tantos milagros en ella, que este con toda veneración, por ende Yo vos ruego y encargo que luego que esta veays, proveays como se aga un humilladero donde este dicha Cruz de la forma que os pareciere, de manera que este cerrada y con la mas devoción que ser pueda, que en ello me serviréis. De Madrid a diez dias del ems de agosto de mil e quinientos y treyntay nueve anos. (sic)”. 

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