Asesinan preso en La Victoria en momentos en que Alicia Ortega hacía reportaje

Por Servicios de Acento.com.do. 4 de noviembre de 2014 - 7:00 am 

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Un cementerio de hombres vivos entre el hacinamiento, el sucio y el peligro. Más de 8,000 reos en un espacio para 2,000 en la Penitenciaría Nacional de La Victoria, un penal sobrepoblado

Colaboración especial de El Informe con Alicia Ortega/Noticias SIN
SANTO DOMINGO, República Dominicana.-En el preciso momento en que la reputada periodista Alicia Ortega buscaba información para un reportaje especial desde el interior de la Penitenciaria Nacional de La Victoria, un recluso fue asesinado por otro.
Las cámaras de El Informe con Alicia Ortega captaron el momento en que varios internos traslada a todoa prisa a su compañero herido para tratar de que se le diera atención médica para preservarle la vida.
José Alberto Mena Batista, de 35 años, un ex policía fue trasladado a toda velocidad al hospital Ney Arias Lora, pero ya no había nada que hacer.
Este suceso violento y las condiciones infrahumanas en que viven los reclusos en la vieja cárcel fue expuestos en el programa de Alicia Ortega este lunes, por Color Visión, canal 9.
A continuación el reportaje completo con sus vídeos
Con instalaciones para 2,000 reos, La Victoria cuenta con un promedio de 8,500 (la cifra varía diariamente), o sea más de un 400 por ciento por encima de su capacidad.  Más de un 62% cumple prisión  preventiva. Esa es precisamente la mayor queja externada a El Informe con Alicia Ortega, durante una visita de un día al penal.
“De ocho citas a la fiscalía, nada más he podido subir tres veces porque no me pueden llevar,” denunció Robinson Rodríguez Sánchez. Asegura que hace un año le retiraron la querella. Los presos también denuncian que para ir a los tribunales, tienen que pagar hasta RD$200 a los guardias.




“Tengo dos años aquí por robo y nunca me han subido a la justicia, llegue de 17 años,” dice Alexander Díaz Agramonte con voz entrecortada y lagrimas en los ojos.  “Mi abuela se murió, mi papá, mi mamá, no tengo nadie que me haga diligencias, hasta que Dios quiera estoy aquí, pienso que me voy a quedar el resto de mi vida.”  Encontramos a Alexander en las celdas 5 y 6, las de mayor hacinamiento en el penal más antigua del país

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El día de nuestra visita, un reo le descargó los seis tiros de un revolver a otro preso

Es el mismo lugar duermen tres y cuatro reos en las llamadas “goletas” de un metro y medio por dos, construidas por los propios internos en un segundo piso improvisado, con pasillos estrechos, oscuros y sin ventilación alguna.  Los presos aseguran que los precios por goleta oscilan entre RD$600 y RD$1,600 semanales que se trata de un negocio  controlado por los mismos reos. “Hay quienes tienen hasta 10 camas alquiladas”, dijo José Miguel Brito, preso por homicidio.
Muchos de los que no pueden pagar pernoctan en los pasillos, les llaman “ranas” porque amarran una sábana de un lado a otro como si fuera una hamaca.  Quienes corren con menos suerte duermen en los baños, donde escasean las duchas pero abundan las letrinas. Allí fácilmente duermen entre 30 y 40. En las paredes cuelgan sacos llenos de las pertenencias de los que no tienen cama permanente.


La insalubridad es palpable a primera vista, cocinan sus alimentos justo al lado de donde hacen sus necesidades fisiológicas. Los que van al comedor llevan todo tipo de envases para verter las raciones que suministra el penal.
Precisamente en el comedor, el reo Nelson Miguel Offerman, denunció que para poder ir al Centro de Atención de Primer Nivel del recinto, supuestamente hay que pagar a los agentes RD$50 por cabeza. “Puede ser un policía, un policía inescrupuloso que lo va a proponer, nosotros no podemos estar detrás de cada policía en el penal”,  comento Tomás Holguín, director general de Prisiones a Alicia Ortega.




Tira en el piso y sin poder valerse por si mismo encontramos a Rafael Antonio Moreno que hace un mes y tres días sufrió una trombosis. “Tenemos que bañarlo, lo van a dejar morir señaló Rafael Robles Reyes, uno de los compañeros que lo ayuda. Agregó aquí a nadie le importa la vida, si siguen metiendo presos se va armar una vaina.
Programas de Rehabilitación
En los programas de Rehabilitación que incluyen cursos educativos de Ebanistería, Tapicería, Sastrería, Pintura  y Decoración, Artesanía en Cuernos, Computación, Electricidad residencial, Reparación de electrodomésticos, Plomería, Repostería, Inglés y Alfabetización, hay cupo para unos 900.  O sea, un 10 por ciento de la población de La Victoria puede participar. “Obviamente la oportunidad es limitada, el obstáculo es el espacio, dice Holguín. Explica que en los programas de regeneración, debería haber al menos 5,000 internos.




Agentes Penitenciarios
Igualmente cuentan solo con 240 agentes para los 8,500 internos, es decir cada oficial tendría a su cargo 35 reos. Lo ideal señala Holguín sería tener por lo menos 800 agentes.




El día de nuestra visita, un reo le descargó los seis tiros de un revolver a otro preso. El cuerpo del recluso José Alberto Mena Batista, de 35 años, un ex policía fue trasladado a toda velocidad al hospital Ney Arias Lora, pero ya no había nada que hacer. El agresor, Luis De Aza Núñez, condenado a la pena máxima por homicidio, reveló que obtuvo el arma de fuego estando recluido.