El programa de Gobierno de Mejía
El programa se inscribe en una visión socialdemócrata
El programa de Gobierno deMejia se inscribe en una visión socialdemócrata que postula la “instauración de un sistema social, político y económico incluyente que mejore la equidad en el acceso a las oportunidades de los dominicanos y dominicanas en el marco del desarrollo humano”
Ello implica que el éxito o fracaso de las instituciones y de las políticas públicas se determina a partir de responder la pregunta de: ¿cuánto y cómo se mejora la calidad de vida de la gente?. Esta visión es diferente a la propuesta del oficialismo cuya atención y ámbito de evaluación está en: ¿cúanto nos acercamos al “Nueva York chiquito”? lo cual sólo se puede determinar desde un helicóptero y donde la gente se invisibiliza.
En la propuesta de Mejía el crecimiento del PIB, las tecnologías, la modernidad y los edificios son medios pero no el fin del desarrollo. Se entiende que el “desarrollo es un proceso que debe reflejarse en la vida cotidiana de las personas. Esto significa tener acceso a un trabajo digno, disfrutar de salud y educación de calidad, participar en las decisiones que les afectan, residir en ciudades y en lugares con seguridad, disponer de agua y alcantarillado, de facilidades de transporte, de vivir en una sociedad en donde se respeten las leyes, entre otros aspectos”.
El Programa de Gobierno de Hipólito Mejía se articula por tres principios: el desarrollo humano y equidad, la generación sustentable de riquezas y el fortalecimiento institucional.
Estos se articulan en una lógica donde “la prioridad está en las personas, generando una riqueza en forma sustentable sin comprometer a las generaciones futuras con deudas sociales, económicas, ambientales e institucionales. La generación de riqueza sustentable se combina con políticas públicas que garanticen la equidad social y territorial en el acceso a las oportunidades, haciendo que los resultados y logros en la vida de las personas dependa más del esfuerzo individual y colectivo que de las circunstancias de nacimiento (clase social, lugar, sexo, raza, etc.). Finalmente, todo ello debe producirse en un orden social basado en los derechos, y en la ausencia de discriminaciones y exclusiones, lo cual reconoce que las personas son portadoras de derechos y la institucionalidad que se construya está obligada a reconocer esa condición”.
Esta lógica conduce las políticas públicas y la propuesta de inversiones que forma parte del Programa. Las inversiones reflejan las necesidades de la población en el territorio, las cuales fueron validadas a través de la “Alianza para el Compromiso”, una consulta a nivel municipal de necesidades.
Adicionalmente se identificaron oportunidades de inversión para el sector privado. La suma de ambas, en el marco de una coherencia macro-economica, determina el valor de la inversión necesario para lograr un “mejor país, pero para todos
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