De acuerdo con los geománticos, Auvernia es el centro energético de Francia (el hara, como se denomina el centro energético en la India), desde el que según ellos se expanden las energías telúricas en espiral por todo el país. El punto de irrupción es el volcán más antiguo, alto y conocido de Francia, el Puy de Dôme, que, con sus 1465 metros de altura, sobresale de lejos entre los cráteres vecinos.
Encima de la montaña sagrada, los galos construyeron un templo en honor de Tutatis, uno de sus dioses principales, mientras que los romanos erigieron posteriormente, encima de un peñasco, un santuario con oráculo dedicado al dios Mercurio. A este lugar se llegaba recorriendo una serie de terrazas y escaleras por las que al parecer no sólo se acercaba uno a la impresionante estatua de bronce del dios, sino también a la propia iluminación.
El macizo montañoso de Mont-Dore, cuyas rocas están formadas por dos tipos de lava, siendo uno rico en ácidos silícicos y el otro pobre, se considera un centro energético. Es posible que el raro fenómeno de los distintos tipos de lava sea la causa de la energía acumulada en el lugar. Asimismo, el peñón de Le Puy y el volcán Puy de Sancy pasan por ser regiones mágicas y sagradas.
En este territorio alrededor del Mont-Dore existen fuentes termales -como por ejemplo en el balneario de La Bourboule o el manantial que brota del suelo en el parque de la pequeña población de Fenêstre, junto a las rocas de las hadas- que han contribuido a su vez a la fama de Auvernia como “reino mágico”.
INVERSIÓN TÉRMICA ;
[En Auvernia, situada en el centro-sur de Francia, hay más de sesenta volcanes extinguidos. Entre los más altos figura el de Le-Puy-en-Velay, que tiene forma de peñón y que ejerce una atracción mágica. En la punta hay una capilla consagrada a San Miguel.]
Una parte de las energías mágicas del Puy de Dôme se debe quizá a la radiación que emana de la roca volcánica. Esta contiene minúsculas partículas de óxido de hierro que en estado líquido, es decir, durante una erupción volcánica, tienen la propiedad de colocarse exactamente en línea con el campo magnético. Entre los secretos de la montaña sagrada figura también el fenómeno atmosférico de la inversión térmica: mientras que en el valle hace un frío intenso, en lo alto del Dôme sopla una cálida brisa.
El aire frío pesado desciende y se compacta abajo en el llano, mientras que el aire caliente tiende a subir. Actualmente, este fenómeno meteorológico se conoce en muchos lugares y tiene su explicación, pero los druidas lo consideraban fruto de la magia y de la intervención de los dioses.
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