domingo, 5 de febrero de 2012


Araña macho se parte el órgano sexual para garantizar paternidad

a
Araña
La cajita roja muestra un órgano sexual masculino roto depositado en la araña hembra.
Un nuevo estudio reveló que algunas arañas macho se "castran" voluntariamente durante el acto sexual para aumentar sus posibilidades de paternidad.
Los machos se parten todo el órgano mientras lo tienen dentro de la hembra, lo cual les permite seguir inyectando espermatozoides mucho tiempo después de separarse.
Una rápida escapada del macho suele ocurrir posterior al coito y eso se explica porque muchas veces las hembras se comen a su pareja.
Un equipo publicó en la revista Biology Letters un trabajo en el que se señala que la castración aumenta la cantidad de espermatozoides transferidos.
Esto aumenta las posibilidades de paternidad del macho, explicando un comportamiento que había dejados perplejos a los biólogos porque, en la práctica, deja estériles a las arañas.
La rotura de la punta del palpo, la estructura copuladora básica del macho, es algo que ocurre frecuentemente entre las arañas. Se cree que la función es actuar como "tapón" para impedir que otros machos se apareen con la misma hembra.
Sin embargo, la castración total no era considerada necesaria para que la obstrucción fuese efectiva.
Es por eso que los científicos habían llegado a otras teorías para explicar el comportamiento conocido como el "fenómeno del eunuco".
Entre esas teorías se incluían la llamada hipótesis del combatiente. Los eunucos son más agresivos y ágiles comparados con machos de órganos intactos.

Prolongada transferencia

Sin embargo, Daiqin Li, de la Universidad Nacional de Singapur, y sus colegas decidieron hacer una prueba para ver si la castración resultaba en la continua transferencia de espermatozoides a las hembras de la especie Nephilengys malabarensis.
Los científicos diseccionaron las arañas y contaron los espermatozoides de las partas reproductivas bajo un microscopio.
Sus resultados mostraron que la transferencia del palpo partido continuó después del coito. Entre más tiempo permanecía el órgano roto dentro de la hembra, aumentaba la cantidad de espermatozoides transferidos.
De manera que los autores piensan que la castración voluntaria evolucionó como respuesta tanto al canibalismo de la hembra después del acto sexual como para contrarrestar el deseo de la hembra de controlar la duración del coito.
Romper el palpo completo permite que la transferencia de esperma siga después de que la araña macho se haya fugado y permite que los machos acaparen a la hembra por más tiempo.
Sin embargo el equipo no descarta que haya otros beneficios, tales como el realce de la agresividad en las arañas castradas lo cual justifica aún más el costo de la esterilidad.

Contexto

No hay comentarios:

Publicar un comentario