El papa latinoamericano, un “hombre de Dios” amante del fútbol, tango y Dostoievski
Tema de actualidad: El arzobispo de Buenos Aires elegido nuevo papa
El papa latinoamericano, un “hombre de Dios” amante del fútbol, tango y Dostoievski
© AFP/ Daniel Garcia
23:26 14/03/2013
Moscú, 14 de marzo, RIA Novosti.
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El cardenal argentino Jorge Bergoglio, convertido desde ayer en el primer papa latinoamericano de la historia bajo el nombre de Francisco, tiene la imagen de ser un “hombre de Dios” cercano a los feligreses, con pasión por el tango y el fútbol, y algunos pecados, como su presunta connivencia con la última dictadura argentina.
Sencillo, directo, comprometido y alejado de toda ostentación… Estos son solo algunos de los calificativos que no escatima la prensa de todo el mundo retratando al pontífice 266 de la Iglesia Católica. Son cualidades que se pudieron apreciar ya en su primera aparición en la balconada del Vaticano, a la que acudió sin lucir muchos de los detalles del atuendo papal y dirigiéndose a los fieles con un saludo simple y franco: “Hermanos y hermanas, buenas tardes”.
Nacido hace 76 años en el seno de una familia humilde, la austeridad ha sido el estilo de vida de este graduado en ingeniería química que a los 21 años optó por ingresar en la Compañía de Jesús. Incluso tras convertirse en arzobispo de Buenos Aires, una de las urbes más pobladas del mundo, siguió viviendo en un piso corriente y aprovechó la vestimenta de su antecesor en lugar de encargar una nueva. Se desplazaba todos los días en autobús para ir a trabajar, se hacía la comida y, según se cuenta, solía calzar unos zapatos desgastados. Características que iban muy acordes con su perfil de un acérrimo crítico del capitalismo y gran defensor de los pobres.
El perfil del nuevo papa no estaría completo sin hacer mención de sus aficiones. Hijo de inmigrantes italianos, es no obstante un “argentino hasta la médula”, insisten los medios de su país de origen. Y como un buen argentino, ama el tango, algo que confesó hace años a periodistas argentinos: “El tango es algo que me agrada muchísimo. Es algo que me sale de adentro”.
Otra de las grandes pasiones de Bergoglio es el fútbol. Seguidor del club argentino San Lorenzo de Almagro, llegó a oficiar una misa con motivo del centenario del equipo, fundado en 1908 por otro cura, el padre Lorenzo Massa. Además, se sabe del nuevo pontífice que es un aficionado a la ópera y un lector empedernido, amante de autores clásicos como su compatriota Jorge Luis Borges o el ruso Fiodor Dostoievski.
Sin embargo, el retrato del papa Francisco podría verse ensombrecido por su presunta connivencia con la Junta Militar del dictador argentino Jorge Rafael Videla, ya que fue acusado de colaborar con las autoridades y en particular de denunciar a dos sacerdotes jesuitas críticos con el régimen, según recordaron algunos medios pocas horas después de finalizar el cónclave. En un libro escrito sobre él hace varios años, el propio cardenal sostuvo no obstante que lo que hizo fue proteger y ayudar a compañeros perseguidos.
Lo que jamás se ha puesto en tela de juicio es su clara oposición al matrimonio Kirchner. Entre otras medidas de la pareja presidencial, criticó duramente la legalización del matrimonio homosexual que tachó de “pretensión destructiva al plan de Dios”. Como no podía ser menos en un hombre de la Iglesia, también se opone firmemente al aborto. Admite el uso de anticonceptivos, pero rechaza su distribución gratuita.
Pese a su intransigencia en algunas de las cuestiones más sensibles de la sociedad moderna, muchos expertos internacionales están lejos de considerar a Jorge Bergoglio como sucesor de la línea dura representada por Joseph Ratzinger. Hay incluso quien se atreve con el calificativo de “progresista”, puesto que el argentino es el primer papa jesuita, perteneciente a una orden que en algunas épocas ha llegado a estar enfrentada con Roma y que hoy día se percibe como una alternativa al conservadurismo extremo del Opus Dei.
Algunas voces también señalan su simpatía por los ortodoxos. Así, el sacerdote argentino Mario Beverati, titular de una parroquia católica de Nizhni Nóvgorod, en el corazón de Rusia, afirmó en declaraciones a RIA Novosti que el nuevo pontífice “tiene mucho cariño” por los ortodoxos. El padre Beverati fue destinado a Rusia hace más de 15 años por el Arzobispado porteño encabezado hasta ayer por Bergoglio.
“Tuve una audiencia con el cardenal Bergoglio en noviembre pasado. Bendijo mi parroquia de Nizhni Nóvgorod y mi misión en Rusia”, relató el religioso, quien definió a su compatriota como un “hombre de Dios”.
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