FUERTE DE SAN GERÓNIMO
Texto: Arq. Ernesto Armenteros
La bomba de gasolina que queda en la George Washington y la Avenida Independencia, en la esquina con la calle San Geronimo y la Tratoria Vesubio, están construidas sobre las ruinas del Fuerte de San Gerónimo.
El Fuerte de San Gerónimo fue construido durante el Gobierno del Capitán General Don Cabril de Chávez Osorio (1627-1634). Era de planta cuadrada y hacia mediados del siglo XVII el Conde de Peñalva lo dotó de un foso. Durante la invasión de Penn y Venables, en 1655, presto grandes servicios en la defensa de la ciudad de Santo Domingo. Fue (parcialmente) destruida en 1937 por una explosión.
La explosión ocurrió porque en la "Era de Trujillo", el fuerte era utilizado como polvorín.
En la décadas del 50 aun quedaba gran parte de las ruinas del fuerte. Una estructura imponente. Yo vivía en las cercanías y siendo jóvenes, jugábamos en las ruinas del fuerte y las plazoletas aledañas.
En la década del 60, se solicitó al departamento de Planificación Urbana del Ayuntamiento un permiso para construir una bomba de gasolina sobre las ruinas del Fuerte de San Gerónimo.
La historia que recuerdo es que el Director de Planeamiento Urbano, un arquitecto de reconocida probidad, correctamente, rechazó la solicitud, informando a los promotores que era un oprobio pretender construir una bomba de gasolina sobre un fuerte histórico.
Unos días después, el mismo Director de Planeamiento Urbano que rechazó la solicitud, recorría la Avenida Independencia y cuando llego a la altura de las ruinas de la Fortaleza de San Gerónimo, se encontró que estaban derrumbando los muros del fuerte. Indignado, se paro y le exigió al encargado parar la destrucción de los muros. Este rehusó hacerlo produciendo los planos APROBADOS por el Ayuntamiento. No pudiéndolo creer lo que le presentaron, se devolvió hacia el Ayuntamiento y se dirigió a la oficina del Sindico a decirle lo ocurrido.
El Sindico de aquel entonces, cuyo nombre prefiero no recordar, le dijo que no tenia porque ponerse así, porque el promotor del proyecto había negociado para que le otorgaran el permiso y que él lo había aprobado. Si eso implicaba influencia política o dinero, no lo sé. Pero, no es difícil imaginarse que ambas debieron incidir en una decisión tan truculenta como la de permitir la construcción de una bomba de gasolina sobre una ruina histórica.
El Director de Planeamiento Urbano renuncio. Y, ¿Qué?.
Se construyo una bomba de gasolina sobre un fuerte histórico.
La bomba de gasolina y el ligar que ocupaba la Tratoria del Vesivio, están construidas sobre las ruinas del Fuerte de San Gerónimo. Aun quedan algunos muros entre la George Washington y la costa marina
Texto: Arq. Ernesto Armenteros
La bomba de gasolina que queda en la George Washington y la Avenida Independencia, en la esquina con la calle San Geronimo y la Tratoria Vesubio, están construidas sobre las ruinas del Fuerte de San Gerónimo.
El Fuerte de San Gerónimo fue construido durante el Gobierno del Capitán General Don Cabril de Chávez Osorio (1627-1634). Era de planta cuadrada y hacia mediados del siglo XVII el Conde de Peñalva lo dotó de un foso. Durante la invasión de Penn y Venables, en 1655, presto grandes servicios en la defensa de la ciudad de Santo Domingo. Fue (parcialmente) destruida en 1937 por una explosión.
La explosión ocurrió porque en la "Era de Trujillo", el fuerte era utilizado como polvorín.
En la décadas del 50 aun quedaba gran parte de las ruinas del fuerte. Una estructura imponente. Yo vivía en las cercanías y siendo jóvenes, jugábamos en las ruinas del fuerte y las plazoletas aledañas.
En la década del 60, se solicitó al departamento de Planificación Urbana del Ayuntamiento un permiso para construir una bomba de gasolina sobre las ruinas del Fuerte de San Gerónimo.
La historia que recuerdo es que el Director de Planeamiento Urbano, un arquitecto de reconocida probidad, correctamente, rechazó la solicitud, informando a los promotores que era un oprobio pretender construir una bomba de gasolina sobre un fuerte histórico.
Unos días después, el mismo Director de Planeamiento Urbano que rechazó la solicitud, recorría la Avenida Independencia y cuando llego a la altura de las ruinas de la Fortaleza de San Gerónimo, se encontró que estaban derrumbando los muros del fuerte. Indignado, se paro y le exigió al encargado parar la destrucción de los muros. Este rehusó hacerlo produciendo los planos APROBADOS por el Ayuntamiento. No pudiéndolo creer lo que le presentaron, se devolvió hacia el Ayuntamiento y se dirigió a la oficina del Sindico a decirle lo ocurrido.
El Sindico de aquel entonces, cuyo nombre prefiero no recordar, le dijo que no tenia porque ponerse así, porque el promotor del proyecto había negociado para que le otorgaran el permiso y que él lo había aprobado. Si eso implicaba influencia política o dinero, no lo sé. Pero, no es difícil imaginarse que ambas debieron incidir en una decisión tan truculenta como la de permitir la construcción de una bomba de gasolina sobre una ruina histórica.
El Director de Planeamiento Urbano renuncio. Y, ¿Qué?.
Se construyo una bomba de gasolina sobre un fuerte histórico.
La bomba de gasolina y el ligar que ocupaba la Tratoria del Vesivio, están construidas sobre las ruinas del Fuerte de San Gerónimo. Aun quedan algunos muros entre la George Washington y la costa marina
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