Duarte en las letras: ¿Inimitable o estandarte?
Sobre Juan Pablo Duarte, padre de la patria considerado
ideólogo de la nación dominicana, se han publicado ensayos, biografías,
poemas y artículos de opinión, en distintos momentos históricos y bajo
diversos enfoques, que incluyen al Duarte visionario, el revolucionario,
el inalcanzable, el inimitable; y lo contrario: el modelo, el
estandarte.
Loas. En “El Cristo de la libertad”, obra biográfica publicada en 1950, el extinto Joaquín Balaguer retrata a Duarte primero como un santo y después como el propio Cristo, encarnación de lo divino, y asegura que el prócer “conservó la pureza de su alma cubriéndola con una virginidad sagrada”.
Balaguer califica a Duarte como un hombre “casi extraterreno”. Además, incluye otros adjetivos parecidos: “su voz semisagrada” y “su garganta semidivina”.
Otro libro, “Pedestales: Discursos históricos”, de 1979, incluye un panegírico pronunciado por Balaguer, en ocasión de la develización de una estatua a Duarte, en Santiago de los Caballeros, el 26 de enero de 1975, donde el expresidente dice que el mejor homenaje que podría rendirse al patricio consistiría en “hacernos dignos de su obra y merecedores de su apostolado”.
Contextualización histórica. De Juan Isidro Jiménez Grullón se conserva el ensayo “La ideología revolucionaria de Juan Pablo Duarte”, donde expone el contexto en que se desarrolló el pensamiento duartiano, con su base espiritualista y con tintes de las doctrinas liberales, románticas y nacionalistas
“Siempre se ha dicho que en Duarte había un trasfondo místico. Y Balaguer y en parte Troncoso Sánchez, –cuyas trayectorias públicas durante el trujillato obligan a ver en ellos a señeros exponentes del anti-duartismo– lo han divinizado”, señala.
En el texto, expuesto por primera vez en 1976, Jiménez Grullón afirma que Duarte “tuvo escasa visión de lo concreto”, pero pondera su nacionalismo radical y su anticolonialismo.
Constitución duartiana. Por otro lado, bajo la firma del historiador Fernando Pérez Memén, está el trabajo “El Proyecto de Constitución de Duarte”, donde el autor plantea el contexto en que se elaboró y analiza cada uno de los puntos conocidos del mismo.
Palabras de una poeta prócer. De Salomé Ureña se conserva la “Carta de adhesión del Instituto de Señoritas al proyecto de estatua a Duarte”, fechada 03 de noviembre de 1893, donde se refiere a Duarte como “Patricio inmaculado, cuya vida es alto ejemplo de las virtudes que informan un acendrado patriotismo y un carácter eminente”.
Otra perspectiva. De creación reciente, están los libros del abogado Alfonso Torres Ulloa: “Duarte, desde la palabra” y “Duarte, reto de los democráticos”. El primero está enfocado en la fe del padre de la patria y su influencia en su accionar histórico. El segundo, aborda aspectos biográficos e ideológicos y exhorta a “los democráticos” a ser abanderados del pensamiento duartiano, a fin de arraigar las luchas por una República Dominicana mejor.
También en la bibliografía nacional destaca el abordaje del historiador Juan Daniel Balcácer, quien escribió dos trabajos biográficos sobre Duarte y uno sobre su pensamiento político. Asimismo, Enrique Patín Veloz con su ¿Cómo era y cómo vivió el Duarte de la Independencia?
En su bicentenario. La presencia simbólica de Juan Pablo Duarte parece estar creciendo cuando se cumplen 200 años de su nacimiento, irrumpe en las redes sociales, en las líneas de tiempo de Twitter, saliendo de los dedos de gente joven, que lo ve estandarte necesario en estos tiempos de globalización.
Una breve visita a la Casa de Duarte
La casona con estilo colonial, esa en la que nos encontramos de cerca con la heroica y noble historia del Padre de la Patria dominicana, está inmersa en un proceso de hermoseamiento, con motivo de conmemorarse este año el bicentenario de su nacimiento.
Loas. En “El Cristo de la libertad”, obra biográfica publicada en 1950, el extinto Joaquín Balaguer retrata a Duarte primero como un santo y después como el propio Cristo, encarnación de lo divino, y asegura que el prócer “conservó la pureza de su alma cubriéndola con una virginidad sagrada”.
Balaguer califica a Duarte como un hombre “casi extraterreno”. Además, incluye otros adjetivos parecidos: “su voz semisagrada” y “su garganta semidivina”.
Otro libro, “Pedestales: Discursos históricos”, de 1979, incluye un panegírico pronunciado por Balaguer, en ocasión de la develización de una estatua a Duarte, en Santiago de los Caballeros, el 26 de enero de 1975, donde el expresidente dice que el mejor homenaje que podría rendirse al patricio consistiría en “hacernos dignos de su obra y merecedores de su apostolado”.
Contextualización histórica. De Juan Isidro Jiménez Grullón se conserva el ensayo “La ideología revolucionaria de Juan Pablo Duarte”, donde expone el contexto en que se desarrolló el pensamiento duartiano, con su base espiritualista y con tintes de las doctrinas liberales, románticas y nacionalistas
“Siempre se ha dicho que en Duarte había un trasfondo místico. Y Balaguer y en parte Troncoso Sánchez, –cuyas trayectorias públicas durante el trujillato obligan a ver en ellos a señeros exponentes del anti-duartismo– lo han divinizado”, señala.
En el texto, expuesto por primera vez en 1976, Jiménez Grullón afirma que Duarte “tuvo escasa visión de lo concreto”, pero pondera su nacionalismo radical y su anticolonialismo.
Constitución duartiana. Por otro lado, bajo la firma del historiador Fernando Pérez Memén, está el trabajo “El Proyecto de Constitución de Duarte”, donde el autor plantea el contexto en que se elaboró y analiza cada uno de los puntos conocidos del mismo.
Palabras de una poeta prócer. De Salomé Ureña se conserva la “Carta de adhesión del Instituto de Señoritas al proyecto de estatua a Duarte”, fechada 03 de noviembre de 1893, donde se refiere a Duarte como “Patricio inmaculado, cuya vida es alto ejemplo de las virtudes que informan un acendrado patriotismo y un carácter eminente”.
Otra perspectiva. De creación reciente, están los libros del abogado Alfonso Torres Ulloa: “Duarte, desde la palabra” y “Duarte, reto de los democráticos”. El primero está enfocado en la fe del padre de la patria y su influencia en su accionar histórico. El segundo, aborda aspectos biográficos e ideológicos y exhorta a “los democráticos” a ser abanderados del pensamiento duartiano, a fin de arraigar las luchas por una República Dominicana mejor.
También en la bibliografía nacional destaca el abordaje del historiador Juan Daniel Balcácer, quien escribió dos trabajos biográficos sobre Duarte y uno sobre su pensamiento político. Asimismo, Enrique Patín Veloz con su ¿Cómo era y cómo vivió el Duarte de la Independencia?
En su bicentenario. La presencia simbólica de Juan Pablo Duarte parece estar creciendo cuando se cumplen 200 años de su nacimiento, irrumpe en las redes sociales, en las líneas de tiempo de Twitter, saliendo de los dedos de gente joven, que lo ve estandarte necesario en estos tiempos de globalización.
Una breve visita a la Casa de Duarte
La casona con estilo colonial, esa en la que nos encontramos de cerca con la heroica y noble historia del Padre de la Patria dominicana, está inmersa en un proceso de hermoseamiento, con motivo de conmemorarse este año el bicentenario de su nacimiento.
Allí, donde por primera vez vio la luz del mundo un
26 de enero de 1813 el patricio Juan Pablo Duarte, se trabaja ahora en
el saneamiento y curación de las maderas dañadas por la carcoma, en el
embellecimiento de la pintura de las paredes, plafones de los techos,
barniz de las pasamanería y otros detalles que harán de este hábitat
que perteneciera a la familia Duarte y Díez un mejor referente
histórico, especialmente para las nuevas generaciones.
A propósito de esta importante conmemoración en la
que los dominicanos recordamos los ideales y manera en que el prócer
Juan Pablo Duarte trazó las pautas para que hoy nuestra República
Dominicana profese orgullosa libertad e independencia, entrevistamos al
presidente del Instituto Duartiano, José Joaquín Pérez Saviñón en sus
oficinas de la casa museo ubicada en la calle Isabel La Católica 308 en
la Ciudad Colonial.
Llegamos puntuales a la hora acordada -10:30 de la
mañana- sin embargo, no pudimos conversar con él de inmediato debido a
las diversas solicitudes de personas que lo requieren en estos días,
precisamente para tratar asuntos relacionados con los actos patrios que
se estarán desarrollando en todo el país.
Cuando logramos sentarnos con él, tras otra
petición de un señor de “cinco segundos”, vimos en José Joaquín Pérez
Saviñón a un hombre totalmente convencido e inmerso en los ideales y
forma de comportamiento del patricio Juan Pablo Duarte y Díez.
Tanta es la percepción de la personalidad heroíca
que sigue y predica este hombre que es imposible no salir orgulloso de
quien fuera nuestro patricio.
Remodelación de la Casa-Museo de Duarte.
Cuando llegamos a la casa y nos encontramos con los trabajos y todo
el mobiliario recogido, pese a que se acerca la celebración del
natalicio del patricio, la primera pregunta fue qué pasaba con la
histórica infraestructura.
Con un rostro aparentemente cansado por todo el
trabajo que tiene pero con el carácter afable que le caracteriza, José
Joaquín Saviñón nos contó que se trataba de un hermoseamiento a la
casa-museo, pero conservando siempre la originalidad de ésta.
“Estamos tratando un poco las maderas, las cuales
estaban dañadas por carcomas, retocando las paredes y la pintura, que
por el paso del tiempo se nos estaban prácticamente cayendo”, nos dijo.
Todo permanecerá igual en cuanto a la estructura,
pero con una nueva cara no sólo en la apariencia física, sino también en
la digitalización de sus documentos, ya que parte de la remodelación
incluye la tecnología de punta, a fin de que todo lo que tiene el
Instituto Duartiano sea más atractivo para la juventud. Tendrán
plasmas, proyectores de imágenes para hacer más dinámicas las
historias sobre Duarte y su familia
.
18 Enero 2013, 11:31 AM
DUARTE: Su ideario 200 años después
"Nunca me fue tan necesario como hoy el tener salud,
corazón y juicio; hoy que hombres sin juicio y sin corazón conspiran
contra la salud de la Patria".
"Procuraré conservarme bueno, conservaré mi corazón y mi cabeza".
"Dios ha de concederme bastante fortaleza para no descender a la tumba sin dejar a mi Patria libre, independiente y triunfante".
"Hay palabras que por las ideas que revelan llaman nuestra atención y atraen nuestras simpatías hacia los seres que las pronuncian".
"Los providencialistas son los que salvarán la Patria del infierno a que la tienen condenada los ateos, cosmopolitas y orcopolitas".
"El crimen no prescribe ni queda jamás impune".
"El buen dominicano tiene hambre y sed de justicia ha largo tiempo, y si el mundo se la negase, Dios que es la Suma Bondad, sabrá hacérsela cumplida y no muy dilatado; y entonces, !ay! de los que tuvieron oídos para oir y no oyeron, de los que tuvieron ojos para ver y no vieron... !la Eternidad de nuestra idea! porque ellos habrán de oir y habrán de ver entonces lo que no hubieran querido oir ni ver jamás".
"En lo que están de acuerdo nuestros libertos es en lo del amo que quieren imponerle al pueblo".
"Trabajemos por y para la patria, que es trabajar para nuestros hijos y para nosotros mismos".
"Trabajemos, trabajemos sin descansar, no hay que perder la fe en Dios, en la justicia de nuestra causa y en nuestros propios brazos".
"¿Tienes amigos? prepáralos, porque los días se acercan; procura que no se descarríen, pues va a sonar la hora de anularse para siempre, la hora tremenda del juicio de Dios, y el Providencial no será vengativo, pero sí justiciero".
"Vivir sin patria es lo mismo que vivir sin Honor".
"Los enemigos de la Patria, por consiguiente nuestros, están todos muy acordes en estas ideas: destruir la Nacionalidad aunque para ello sea preciso aniquilar la nación entera".
"No somos más que unos ambiciosos que independizamos nuestro pueblo por ambición y no tuvimos talento para hacer nuestra la riqueza ajena; mientras que ellos (los orcopolitas), son los hombres honrados y virtuosos pues han tenido la habilidad de hacerlo todo, hasta llamar al extranjero; muestra inequívoca de lo muy amados que serán por la justicia con que han procedido y procederán para con Dios y la Patria y la Libertad del Dominicano".
"Toda ley no declarada irrevocable es derogable y también reformable en el todo o en parte de ella".
"Toda ley no derogada clara y terminantemente se considerará vigente".
"La ley no puede tener, ni podrá tener jamás, efecto retroactivo".
"Ninguno podrá ser juzgado sino con arreglo a la ley vigente y anterior a su delito; ni podrá aplicársele en ningún caso otra pena que la establecida por las leyes y en la forma que ellas prescriban".
"¡Aprovechemos el tiempo!"
Lo que la ley no prohíbe, ninguna persona, sea o no sea autoridad, tiene derecho a prohibirlo.
"La ley, salvo las rrestrucciones del derecho, debe ser conservadora y protectora de la vida, libertad, honor y propiedades del individuo".
"Todo poder dominicano está y deberá estar siempre limitado por la ley y ésta por la justicia, la cual consiste en dar a cada uno lo que en derecho le pertenezca".
"Ningún poder en la tierra es ilimitado, ni el de la ley tampoco".
"Procuraré conservarme bueno, conservaré mi corazón y mi cabeza".
"Dios ha de concederme bastante fortaleza para no descender a la tumba sin dejar a mi Patria libre, independiente y triunfante".
"Hay palabras que por las ideas que revelan llaman nuestra atención y atraen nuestras simpatías hacia los seres que las pronuncian".
"Los providencialistas son los que salvarán la Patria del infierno a que la tienen condenada los ateos, cosmopolitas y orcopolitas".
"El crimen no prescribe ni queda jamás impune".
"El buen dominicano tiene hambre y sed de justicia ha largo tiempo, y si el mundo se la negase, Dios que es la Suma Bondad, sabrá hacérsela cumplida y no muy dilatado; y entonces, !ay! de los que tuvieron oídos para oir y no oyeron, de los que tuvieron ojos para ver y no vieron... !la Eternidad de nuestra idea! porque ellos habrán de oir y habrán de ver entonces lo que no hubieran querido oir ni ver jamás".
"En lo que están de acuerdo nuestros libertos es en lo del amo que quieren imponerle al pueblo".
"Trabajemos por y para la patria, que es trabajar para nuestros hijos y para nosotros mismos".
"Trabajemos, trabajemos sin descansar, no hay que perder la fe en Dios, en la justicia de nuestra causa y en nuestros propios brazos".
"¿Tienes amigos? prepáralos, porque los días se acercan; procura que no se descarríen, pues va a sonar la hora de anularse para siempre, la hora tremenda del juicio de Dios, y el Providencial no será vengativo, pero sí justiciero".
"Vivir sin patria es lo mismo que vivir sin Honor".
"Los enemigos de la Patria, por consiguiente nuestros, están todos muy acordes en estas ideas: destruir la Nacionalidad aunque para ello sea preciso aniquilar la nación entera".
"No somos más que unos ambiciosos que independizamos nuestro pueblo por ambición y no tuvimos talento para hacer nuestra la riqueza ajena; mientras que ellos (los orcopolitas), son los hombres honrados y virtuosos pues han tenido la habilidad de hacerlo todo, hasta llamar al extranjero; muestra inequívoca de lo muy amados que serán por la justicia con que han procedido y procederán para con Dios y la Patria y la Libertad del Dominicano".
"Toda ley no declarada irrevocable es derogable y también reformable en el todo o en parte de ella".
"Toda ley no derogada clara y terminantemente se considerará vigente".
"La ley no puede tener, ni podrá tener jamás, efecto retroactivo".
"Ninguno podrá ser juzgado sino con arreglo a la ley vigente y anterior a su delito; ni podrá aplicársele en ningún caso otra pena que la establecida por las leyes y en la forma que ellas prescriban".
"¡Aprovechemos el tiempo!"
Lo que la ley no prohíbe, ninguna persona, sea o no sea autoridad, tiene derecho a prohibirlo.
"La ley, salvo las rrestrucciones del derecho, debe ser conservadora y protectora de la vida, libertad, honor y propiedades del individuo".
"Todo poder dominicano está y deberá estar siempre limitado por la ley y ésta por la justicia, la cual consiste en dar a cada uno lo que en derecho le pertenezca".
"Ningún poder en la tierra es ilimitado, ni el de la ley tampoco".
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