Un
monumento en La Vega, para Las Hnas. Villas del Obre,
Los pueblos para mantener en el corazón
muchas veces olvidados de las generaciones vivas y ardientes el sagrado culto
de sus gestas nobles y patrióticas, necesitan simbolizar en el mármol o en
broce las figuras gallardas de sus preclaros paladines.
Porque cada figura de legitima actuaciones en
la historia que se corporalice en la imponente majestad de un monumento,
es un índice firme que ayuda a sostener a los pueblos en las rutas
luminosas que los conduzca a la cabal realización de su destino.
Será de gran importancia para este pueblo que se rinda el merecido homenaje
a estas tres damas que marcaron con su hazaña, una página de gloria para la
ciudad de la Concepción de La Vega. Los
veganos tienen una deuda de gratitud hacia
esas distinguidas damas de esta sociedad,
que un 4 de marzo del 1844, entregaron a los veganos la primera Bandera
Nacional, que ondeara los cielos del
Cibao, y fue en esta blasonada ciudad de La Vega, que se realizó esta patriótica hazaña, ellas a sugerencia del
fundador de nuestra nacionalidad Juan Pablo Duarte, que le encomendó hacerla. Y en fiel cumplimiento
patriótico la confeccionaron y la entregaron
a los veganos esa fecha memorable del 4 de marzo del 1844. Que en la
actualidad se conmemora con varios actos. Y que por disposición municipal es
descarado día festivo.
Las Hermanas Villas del Obre, se merecen que en la tierra que le vio nacer y en
recordación a sus méritos en pos de la
Independencia de Nuestra Nación, que
esta generación de veganos, honremos su memoria con un monumento a su memoria.
Los héroes y las heroínas, como
confirmación de su duro apostolado, son
víctimas por tiempo de las garras inmisericordes del olvido. Pero los pueblos
por ellos redimidos al fin recapacitan, y le rinden la merecida justica de ser
recordado. Los veganos con mentalidad de olvido, tienen que volver sus mentes
atrás y recordar la historia, dándole el merecido reconocimiento a estas tres
damas que llevaron a La Vega, en un capítulo de los anales de la historia
dominicana, en los tiempos de la Independencia nacional, es por ello que
abogamos por el monumento a las Hnas.
Villas del Obre.
Es necesario perpetuar en el broce o el
mármol las figuras de estas tres
notables damas, una exaltación a la mujer vegana, generosa, tierna,
exquisita, apasionada, donde florecen eternamente el amor y el
reconocimiento, con su fuerte disposición al sacrificio, la perene fervor al alma
gloriosa y perpetua de patria.
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